José Romera, agricultor almeriense de la cooperativa Vicasol, ha integrado una tecnología clave para mejorar el manejo del riego en su finca ubicada en El Ejido, una zona donde el agua es un elemento cada vez más escaso. En sus invernaderos cultiva 4,3 hectáreas de tomate pera de la variedad Trujillo y tiene un sistema de riego por goteo con una tecnología asociada que le permite ahorrar un 15% de agua.
Elena Martín Seseña. Redacción.
La creciente problemática de la escasez de agua, los impactos del cambio climático y la tendencia por la agricultura sostenible en los mercados europeos, ha desembocado en la modernización de las prácticas y herramientas de cultivo mediante nuevas tecnologías que ofrecen soluciones encaminadas a la optimización del uso del agua, la mejora del sistema de recursos hidráulicos y su gestión, etc.
A esto hay que añadir que la agricultura ya utiliza un 70% de los recursos hídricos disponibles y que su demanda aumenta en la misma medida que lo hace la población mundial.
Ante esto, en 2018, se puso en marcha el Grupo Operativo H3+ de carácter autonómico, formado por Coexphal, Caparrós Nature, Wise Irrisystem, la Universidad de Almería y Proyecta Ingenio. Bajo el nombre ‘Agricultura de precisión como ventaja competitiva del sector hortofrutícola’ este proyecto se financia a través de los Programas de Desarrollo Rural (2014-2020) del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
El principal interés del proyecto ha sido dotar al sector hortofrutícola de herramientas y medios usables, eficientes, sencillos y económicos, diseñados directamente para el agricultor con los que se pudiera (de forma autónoma) adquirir información inmediata del cultivo y así poder incidir en la toma de decisiones relacionadas con el riego, impidiendo un manejo arbitrario del mismo y repercutiendo en un ahorro de agua de al menos un 25%. Responsables del grupo operativo han apuntado que para lograrlo la tecnología ha sido clave.
Para ello, han desarrollado una metodología que ese uso eficiente del agua en la agricultura intensiva y al aire libre del sureste español con sistemas tecnológicos innovadores utilizando la aplicación del IoT (Internet ofThings) y el Big data, entre otros, y mediante una plataforma integral multivariable al servicio de los agricultores, organizaciones de productores y comunidad de regantes.
El grupo operativo H3+ utilizó el fertirriego inteligente, tensiómetros para regar únicamente cuando la planta lo demandaba, y la eficiencia de la instalación hidráulica de la finca. Unas técnicas que después de sus ensayos suponían y garantizaban una disminución en el consumo de agua y de manera paralela de fertilizantes (favoreciendo una reducción de un 8% de la concentración de nitratos en el suelo). Para ello, se contó con Wise Lite, una solución tecnológica para el manejo efectivo del fertirriego en todo tipo de cultivos que se basa en suministrar datos al agricultor.
Ensayos para la disminución de la huella hídrica en Romera Escobar
José Romera, agricultor de la cooperativa Vicasol y propietario de la empresa Romera Escobar, lleva más de 20 años dedicados al sector hortícola. Cultiva tomate, sandía y pepino en sus 20 hectáreas distribuidas en varias parcelas en El Ejido y la Mojonera (Poniente almeriense).
Hace tres campañas decidió instalar el sistema de riego por goteo de Wise Irrisystem en una de las fincas ubicada en El Ejido, donde cuenta con 4,3 hectáreas de tomate pera de la variedad Trujillo, de los que obtiene 10,5 kg por m2.
Allí realizaron un estudio de la capacidad de retención de agua de los suelos (curvas de retención de la humedad), que aportaron los rangos de humedad adecuados para esos suelos y mediante las mediciones continuas de los tensiómetros electrónicos se ha podido llevar a cabo el riego controlado.
Estos datos se van almacenando en un servidor o en la nube disponible para el agricultor a través de su móvil o cualquier otro dispositivo. Además, como también hay medidores de temperatura y humedad del ambiente, se puede calcular el déficit de presión de vapor.
Una vez registrados los datos, se interpretan en la aplicación móvil disponible para el agricultor y de un vistazo y en cualquier momento, este puede ver en qué estado de humedad está su cultivo.
Según Romera, si compara los resultados obtenidos con anteriores campañas en las que no contaban con esta tecnología, a simple vista no ha cambiado nada, pero lo que sí han notado ha sido un ahorro de un 15% de agua y de abono. Además, han comprobado que al mantener en equilibrio hídrico la planta, se evita la pérdida energética por estrés innecesario, generando más producción y de primera calidad.
“Decidimos confiar en la herramienta de Wise Irrisystem porque podíamos conseguir datos más útiles de nuestra plantación para mejorar la salud de la planta y, por lo tanto, la calidad del producto. Por otro lado, también podíamos ser más respetuosos con el medio ambiente”, ha apuntado el agricultor añadiendo que el uso de esta tecnología también les permite diferenciarse y ser más competitivos en los mercados (en su caso, europeos).
“Antes estábamos centrados en conseguir la máxima producción con la máxima calidad, ahora nos hemos dado cuenta de que integrando herramientas de agricultura de precisión los objetivos marcados se pueden conseguir más fácilmente y, además, cuidamos el medio ambiente. Destacando por nuestra calidad ahora también hemos conseguido apuntar hacia lo sostenible y mejorar el sistema de riego, una parte fundamental en los invernaderos”, ha apuntado Romera.
Este agricultor cuenta con otra finca en El Ejido de 10 ha de sandía de la variedad Bengala de las cuales obtiene 8 kg por m2. En esta finca todavía no ha instalado estas herramientas innovadoras, pero no descarta hacerlo pronto.
Las técnicas de riego en Almería han evolucionado hasta conseguir ser una de las regiones de España con una huella hídrica de las más bajas de Europa (entendida ‘huella hídrica’ como aquella que cuantifica el volumen de agua dulce aplicado directa e indirectamente para producir una unidad de un producto concreto).
“El agua se ha convertido en un elemento escaso y tarde o temprano las redes comercializadoras de los alimentos incluirán en sus protocolos de sostenibilidad la exigencia de que la producción suministrada cumpla con reglas de eficiencia hídrica. Por eso, si hay agricultores que cumplen ya con estos posibles requerimientos por qué no adelantarse y establecer un proceso en el que se pueda cuantificar la eficiencia hídrica del agricultor mediante una tecnología reconocida; y que el proceso sea auditado con auditores externos y formados para poder otorgar un certificado de veracidad de estas prácticas”, ha destacado Gabriel Camhi, director general de Wise Irrisystem.
Camhi ha apuntado que con este proceso crean por primera vez una coincidencia completa entre los requisitos para la certificación y los requisitos para llevar a cabo un riego eficiente.
Certificación de riego eficiente H3+
José Romera ha sido el primer agricultor que ha recibido el certificado de sostenibilidad hídrica y riego eficiente H3+ de manos del gerente de Agrocolor, Juan Ignacio Pérez Zamarrón. A partir de ahora, Romera aporta un valor añadido más a sus cultivos y por ende a sus productos, aplicando así un uso sostenible del agua mucho antes de que sea un requisito exigido en la política agraria de la Unión Europea.
“Esta certificación acredita ante los mercados y las administraciones el uso apropiado y, por consiguiente, el ahorro de agua y fertilizante que hacemos en nuestra empresa, y eso es muy satisfactorio para nosotros”, ha apuntado Romera. En 2020, esta certificación presentada por Agrocolor, se convertía en la ganadora del premio Innovation Hub en Fruit Attraction Live Connect, dentro de la categoría Industria Auxiliar.
Referencias:
https://www.aenverde.es/nueva-certificacion-de-la-huella-hidrica-para-producciones-agricolas/