Iván Martín, responsable del departamento agronómico de Azucarera, nos cuenta la relación que existe con sus agricultores colaboradores, los distintos contratos a los que pueden acceder y otras opciones de gestión del cultivo.
¿Qué requisitos debe cumplir un agricultor para poder firmar un contrato con Azucarera?
En Azucarera tenemos abiertas las puertas a todos los agricultores remolacheros y a los que se quieran incorporar al cultivo. Tanto las tres fábricas de la zona norte en Toro, La Bañeza y Miranda de Ebro, como la fábrica de Jerez de la Frontera tienen un gran potencial. Seguimos realizando las inversiones necesarias para optimizar la extracción y el consumo energético y convertir nuestros centros en los más eficientes de Europa. Además, nuestros equipos técnicos trabajan diariamente acompañando a los remolacheros y asesorándoles en las mejores prácticas agronómicas que ayuden a mejorar rendimientos y reducir los costes.
¿Cuáles son las condiciones del contrato a efectos de las prácticas del cultivo?
Tratamos de tener distintas modalidades de contrato para nuestros agricultores y de llegar a un acuerdo donde ambas partes nos sintamos cómodos. Tenemos un modelo en el que los agricultores realizan todas las prácticas de cultivo y otros en los que sólo realizan parte. El remolachero decide qué actividades quiere llevar a cabo y hay casos en los que nosotros nos encargamos de todo, salvo del riego. El agricultor a veces toma esta decisión porque no tiene la maquinaria necesaria o porque busca una mayor comodidad a la hora de llevar a cabo algunas labores.
¿Se fija un precio de venta? ¿De qué depende?
Ponemos a disposición del remolachero dos modalidades de contratación. Por un lado, un Modelo de Precio Garantizado compuesto de una base de 36 €/t (26 €/t precio base y 10 €/t estimación media de ayudas) y al que se le suma un complemento del azúcar vinculado al precio del mismo en el mercado europeo. Este complemento se calcula con la siguiente fórmula: Complemento azúcar (€/t tipo): [Paz-400] x 4% (siendo Paz el precio medio del azúcar blanco expresado en €/t publicado por el Observatorio del Mercado del Azúcar de la UE durante el periodo de referencia). Así por ejemplo, por cada 10 €/t que se incremente el precio medio del azúcar por encima de 400 €/t, el complemento hará lo propio en 0,4 €/t.
Si bien el periodo de referencia se establece de octubre del año de la siembra hasta septiembre del siguiente, los remolacheros que escojan este modelo, percibirán el complemento durante la misma campaña, debido a que los valores que estarán publicados, de octubre a enero, son suficientes para realizar una estimación que podrá ser revisada en los siguientes meses si fuera necesario.
Por otro lado, también ofrecemos la opción del Modelo de Ingreso Garantizado con el objetivo de proporcionar una mayor seguridad económica. Durante esta contratación asumimos el coste y riesgo de las labores que el agricultor desee, garantizando un ingreso al que se añadirá de forma íntegra el complemento del azúcar.
En ambos casos, si los precios del azúcar continúan, como anuncian los expertos, con una tendencia al alza, el remolachero percibirá la próxima campaña un mínimo de 39 €/t. E incluso, en algunos casos, un precio mayor al que ha percibido en campañas anteriores.
¿Existe un técnico de campo que asesora a los agricultores?
Sí, por supuesto. Tenemos un gran equipo de técnicos que acompañan a nuestros agricultores de manera personalizada durante todo el ciclo del cultivo. También contamos con Aimcra, la asociación creada y financiada por Azucarera y sus agricultores contratantes, en la que nos apoyamos mucho para las recomendaciones que hacemos y para conocer las nuevas técnicas agronómicas que van apareciendo.
El técnico visita la parcela de forma continua, pero depende de la época en la que nos encontremos. En el cultivo existen momentos más críticos como son el control de malas hierbas, plagas y cercospora, en los que intentamos estar presentes y ayudar al agricultor a tomar la mejor decisión para su cultivo. Procuramos tratar todas las dudas in situ, pero si no se puede, tratamos de resolverlo por teléfono.
Además, el año pasado empezamos un nuevo programa de mejora de rendimientos con nuestros agricultores, denominado True Potential (el verdadero potencial), con el que tratamos de fomentar el intercambio de experiencias prácticas entre nuestros agricultores. Por primera vez hemos unido la técnica aprendida de los campos de ensayo con las experiencias prácticas de nuestros mejores agricultores de cada zona. A pesar de que este año no ha sido muy bueno en rendimientos hemos conseguido reducir la distancia en rendimiento y polarización entre agricultores.
¿Azucarera elige la variedad a sembrar o da varias opciones?
El agricultor elige la variedad que quiere sembrar, pero sí que le ofrecemos una recomendación en base a las problemáticas que pueda tener su parcela como cercospora, oídio, rhizoctonia, nematodos, control de malas hierbas, etc. Cada año, a través de Aimcra, realizamos ensayos de las nuevas variedades que van apareciendo en el mercado, para ponerlos a disposición del agricultor. Para robustecer este análisis también tenemos en cuenta el comportamiento que han tenido las variedades en los campos de los agricultores los años anteriores.
En Azucarera además negociamos con las casas de semillas para conseguir un precio más competitivo a nuestros agricultores.
¿Cuáles son las recomendaciones en fertilización, control fitosanitario y riego?
Todas nuestras recomendaciones agronómicas vienen avaladas por la investigación realizada en Aimcra durante años y es transferida a nuestros agricultores a través de los técnicos de campo, formaciones grupales, la web, la app y las cuatro revistas que publicamos desde Aimcra a lo largo del ciclo del cultivo.
Anualmente se ensayan y se revisan las recomendaciones para ofrecer la mejor solución al agricultor. La recomendación de la fertilización la hacemos en base a los resultados de la analítica de suelos que realizamos de manera gratuita para nuestros agricultores.
La enfermedad con la que estamos teniendo más problemas estos últimos años es la cercospora, que está siendo muy virulenta. Su influencia depende mucho de las condiciones climáticas, pero es fundamental para un mejor control aplicar lo antes posible el primer fungicida mezclado con mancozeb.
Para el riego recomendamos utilizar el balance hídrico. Semanalmente a través de nuestra app de Aimcra enviamos el consumo semanal de cultivo de manera genérica para cada una de las zonas. Estamos dando poco a poco el paso a poder hacer vía satelital esta recomendación parcela a parcela.
¿Tienen algún sistema de alertas para anticiparse a determinados estreses?
Estamos trabajando en varios modelos predictivos, aunque todavía están en la primera fase de ajuste, por lo tanto, no pueden ser aplicados por nuestros agricultores. Tenemos en desarrollo un modelo agroclimático de predicción de cercospora y un modelo de cultivo basado en la experiencia que tenemos recogida de nuestros agricultores.
¿La recolección se realiza con maquinaria propia de Azucarera?
Azucarera no tiene maquinaria propia, pero sí que ayudamos a la coordinación de los arranques y transporte de la remolacha a fábrica para que se haga con la mayor calidad posible en función de las circunstancias del suelo y a un precio competitivo. Algunos agricultores disponen de su propia maquinaria y son ellos mismos los que se encargan de realizar la cosecha.
Una vez recolectada, ¿en cuánto tiempo se hace efectivo el pago de la cosecha?
Después de recolectar la remolacha y ser entregada en fábrica, el pago se realiza el día 10 de cada mes y los agricultores que son de Agroteo, colectivo participado por Azucarera y remolacheros, reciben el pago de la remolacha entregada cada 10 días aproximadamente.
¿Es un cultivo rentable?
Actualmente el cultivo ofrece una rentabilidad razonable, pero es muy complicado hablar de rentabilidad media ya que existe una gran variabilidad en la estructura de costes de las explotaciones agrarias (algo explicado fundamentalmente por la infraestructura de riego de la que forman parte), así como en los rendimientos e incluso en el manejo del cultivo, dependiendo en cualquier caso de las circunstancias meteorológicas propias de cada zona remolachera.
Como comentaba, esta campaña ha habido un cambio de modelo al que debemos adaptarnos frente a un mercado liberalizado. Compartiremos con el remolachero, además del precio base, que supone asegurar una rentabilidad, los beneficios que provengan de la subida de precios del azúcar.
¿Qué nuevas iniciativas y proyectos de apoyo al agricultor tienen en marcha?
La prohibición de la clotianidina y diatometoxam en el pildorado de la semilla hace que hayamos puesto en marcha dos iniciativas. Por un lado, aprender del uso de las materias activas, dosis y tiempos de aplicación que tenemos disponibles para el control del pulgón y pulguilla. Y por otro lado, investigar las eficacias de otros productos que están incorporándose como alternativa en otros países de la UE.
También tenemos el proyecto que hemos llamado Zero Cercospora, en el que trabajamos tres líneas en paralelo: 1) el ensayo de variedades más tolerantes a la enfermedad, 2) nuevos productos, dosis y momentos de aplicación y 3) la aplicación de modelos predictivos para poder avisar del riesgo de que aparezca la enfermedad.
Otro de nuestros nuevos proyectos es el que hemos lanzado junto con Agroteo de agricultura de precisión, basado en tecnología satelital y de dron. Se trata de un proyecto todavía en fase de piloto, con el que se conseguirán avances importantes en el ámbito de la optimización de costes, incremento de la producción y mejora de la comodidad en el manejo del cultivo.
¿Qué ventajas tiene para el agricultor firmar un contrato con Azucarera?
Son muchas. En Azucarera trabajamos orientados a una gestión integral y de calidad: anticipamos hasta 600 €/ha, realizamos descuentos en variedades de semilla de alta rentabilidad, y un asesoramiento agronómico en exclusiva llevado a cabo por equipos de alta cualificación durante todas las fases del cultivo. También existe un plan de financiación de inversiones mediante contratos plurianuales para realizar cualquier mejora en la explotación, destacando las relacionadas con la eficiencia energética.
Además, tenemos el objetivo de alcanzar el 100% de satisfacción de los remolacheros durante la campaña de arranques. Somos conscientes de su esfuerzo y planificamos los arranques basándonos en sus necesidades. Adaptamos la apertura de nuestras fábricas al desarrollo de la raíz así como el ritmo de las entregas, para que la remolacha no permanezca en el montón un tiempo excesivo, asegurando, en ambos casos, la máxima rentabilidad para el agricultor. Si el orden de arranque no se cumple (por circunstancias climatológicas, por ejemplo) no existirá ninguna penalización. Lo importante es no poner en riesgo el cultivo siguiente por una mala labor de arranque.
Durante la próxima campaña ratificamos nuestros compromisos con la objetividad y la transparencia, y contaremos con la supervisión externa del 100% de las muestras. El 100% de las reclamaciones serán automáticas (diariamente se analizarán todos los valores de descuento y polarización para ajustar aquéllos que se desvíen de los valores habituales de manera automática). Además, ponemos en marcha jornadas de puertas abiertas al laboratorio y el remolachero podrá consultar los valores de polarización, descuento y reclamaciones vía web o app en tiempo real. n