El cultivo de la vid y la industria vitivinícola constituyen dos de los sectores de la industria agroalimentaria más sensibles a las variaciones climáticas y meteorológicas. El previsible aumento de la temperatura, unido a la existencia de episodios más largos de sequía estival, incrementa la necesidad de estudiar nuevas estrategias y tecnologías de cultivo para garantizar la producción y la supervivencia de la planta.
El proyecto de investigación ‘Sost-Wine: hacia una nueva forma de estimar el agua en la vid’, demuestra que puede mejorarse la competitividad de los productores de uva y vino a través de un ajuste en el riego. Se trata de un proyecto realizado por la empresa Grandes Vinos y Viñedos S.A. y el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA).
El proyecto Sost-Wine, que comenzó en 2012, ha permitido sugerir que la necesidad del riego de invierno puede ser cuestionable en términos de la producción de vinos de calidad y que los diferentes planes de riego de verano utilizados afectan tanto a la producción como a la calidad de los vinos obtenidos a través de ajustes de la fisiología de la vid, en ocasiones muy sutiles.
A partir de esta información, se han definido las mejores condiciones de riego en las diferentes fases del cultivo, tratando de ajustar el riego a la baja, manteniendo e incluso mejorando la calidad del vino final.
Estas conclusiones permitirán ahorros significativos y una mejora de la competitividad en la bodega, que ya había identificado como en algunos mercados internacionales en los que opera, existe una creciente apreciación por las producciones medioambientalmente sostenibles y que la gestión del riego está, en general, poco profesionalizada.
Herramienta de Innovación
Dentro del proyecto también se ha desarrollado el sistema Suni, que permite, de manera no invasiva y portátil, la determinación en el propio campo del contenido de agua de las hojas de la vid.
Los sensores ultrasónicos y electrónicos asociados al aparato están especialmente adaptados (parametrización) a las características de las variedades de vid en estudio Garnacha, Tempranillo y Syrah. De esta manera, se ha trabajado en el ajuste del procedimiento, seleccionando los parámetros que acoplados al aire, de forma más sencilla y precisa, permitían estimar el estado hídrico de las hojas de la vid en estas variedades.
Los procedimientos de medición habituales del estado hídrico de los vegetales disponibles en el mercado son destructivos, lo que puede ser un grave inconveniente en estudios de seguimiento estacional y conllevan el uso de dispositivos no exentos de cierto riesgo operacional por el empleo de alta presión en forma de gas nitrógeno.
El trabajo se ha desarrollado con la colaboración de investigadores de la Universidad de las Islas Baleares y del Centro de Acústica Aplicada y Evaluación no Destructiva (CAEND) del CSIC y liderados por el equipo investigador del CITA de expertos en fisiología vegetal y en relaciones hídricas en plantas leñosas. SOST-WINE ha sido financiado a través del Subprograma INNPACTO del Ministerio de Economía y Competitividad.
La empresa aragonesa Grandes Vinos y Viñedos opera en el sector vitivinícola, comercializando vinos de la D.O. Cariñena, y en ella participan como socios cinco cooperativas que agrupan a unos 1.000 socios agricultores, sumando unas cinco mil hectáreas cultivadas.