El Grupo Operativo de Prevención frente a la Peste Porcina Africana (GO PREVPA) ha reactivado a principios del mes de junio el proceso de monitoreo de poblaciones de jabalí mediante la instalación de cámaras de fototrampeo. El objetivo de esta actividad es estimar valores precisos de densidad de jabalí en diez poblaciones representativas de la diversidad de hábitats y escenarios de gestión de España, y favorecer con ello la gestión de sus poblaciones.

Este trabajo de monitoreo a través de cámaras de fototrampeo sigue el modelo de encuentro aleatorio (REM), ya que se trata de un método práctico y capaz de generar datos fiables.

Esta tarea ha sido llevada a cabo en dos cotos de caza de la mano de dos de los socios del grupo operativo, la Fundación Artemisan y la Asociación Interprofesional de la Carne de Caza (Asiccaza).

Los estudios de fototrampeo permiten calibrar los datos de estadísticos cinegéticos recogidos durante la caza colectiva, aportando resultados fidedignos y esenciales para la correcta monitorización y gestión de las poblaciones de este suido silvestre.

Protocolo estandarizado

El despliegue de estas cámaras, que se ha llevado a cabo en la Sierra de Aracena (Huelva) por parte de Artemisan, y en el Viso del Marqués (Ciudad Real) gracias a Asiccaza, se ha hecho siguiendo el protocolo elaborado por el grupo operativo. La distribución de los dispositivos de fototrampeo se realiza de forma aleatoria mediante una malla de distribución espacial.

En primer lugar, se instalan cámaras de fototrampeo en la mitad de los puntos localizados, que estarán operativas durante un mínimo de 30 días. Tras este periodo, se retiran y se vuelven a disponer en la otra mitad de las localizaciones, manteniéndose operativas durante el mismo periodo de tiempo. Una vez hecho este trabado, se retiran las cámaras para proceder al análisis de toda la información recogida en las zonas de estudio, a fin de estimar densidades de población en dichos puntos.

En los cotos de Aracena y el Viso del Marqués ya se han instado 14 y 11 cámaras de fototrampeo, respectivamente, que estarán recopilando datos durante un mes, hasta que a principios de julio se retiren e instalen en la otra mitad de los puntos de la malla de distribución.

Los resultados obtenidos no solo permitirán cuantificar el tamaño poblacional de estos ungulados, sino que también serán útiles para conocer su distribución espacial, algo vital para el correcto manejo de las poblaciones y para un control eficaz de éstas en caso de un brote de peste porcina africana (PPA).

Mejorar la eficiencia de gestión de las poblaciones de jabalí en España es uno de los grandes objetivos del Grupo Operativo y para ello es indispensable implementar una metodología precisa para la determinación de poblaciones concretas. La sobreabundancia del jabalí en España tiene graves consecuencias sobre la salud, el tráfico, la agricultura y el medio ambiente, por eso su monitorización resulta fundamental para hacer frente a los desafíos que supone el incremente descontrolado de las poblaciones de estos suidos silvestres.