El Grupo Operativo Innovatrigo reúne a los profesionales del sector cerealista y a la administración autonómica para analizar la situación actual y futura.

El Grupo Operativo sobre Innovaciones para la mejora de la sostenibilidad ambiental y económica de la producción de trigo en España (Innovatrigo) ha organizado la Jornada para el Fomento de Políticas Innovadoras y Sostenibles en el Cereal en España, con el objetivo de compartir con las administraciones autonómicas los progresos del proyecto y fomentar así una agricultura innovadora y sostenible.

La bienvenida de la jornada ha corrido a cargo de José María Basanta, secretario general de la Asociación Española de Técnicos Cerealistas, en la que ha presentado Innovatrigo, un grupo operativo que persigue realizar y fomentar la adopción de innovaciones en el manejo de suelo y productos agroquímicos, así como la inclusión de avances tecnológicos y de tecnologías de información y comunicación, que permitan llevar a cabo una producción de trigo sostenible económica y medioambientalmente en España, actuando en todos los eslabones de la cadena de valor. Asimismo, ha destacado que “se promoverán etiquetados de calidad ambiental que proporcionen mayor valor añadido para el agricultor, todo ello, con el fin de contribuir a asegurar el relevo generacional tan necesario en este sector y a crear una industria subsidiaria basada en las nuevas tecnologías”.

La jornada, que ha congregado a 30 personas del sector cerealista, ha sido inaugurada por Mª Pilar Galán López-García, de la Subdirección General de Cultivos Herbáceos e Industriales y Aceite de Oliva, que ha destacado “el sector de los cereales como un sector estratégico, por su conexión con el medio natural y por su importante valor económico”, señalando “la apuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación por todos aquellos proyectos de carácter innovador y sostenible en la agricultura”.

A continuación, Marcos Merino Torrejón, jefe de Producto de Panadería de Carrefour España, ha trasladado la apuesta de su empresa por la transición alimentaria en todos sus productos y también en los productos elaborados con cereales. Durante su ponencia “Tendencias actuales de consumo. Sostenibilidad, Innovación y Medioambiente”, ha recalcado que “el consumidor actual busca productos sostenibles que reduzcan el impacto del medioambiente, lo que ha llevado a Carrefour a reducir el número de aditivos utilizados, apostar por los productores locales y la reducción de plásticos en la sección de frescos”.

Para terminar la jornada, se ha celebrado una mesa redonda moderada por Francisco Márquez, investigador GI AGR 126 “Mecanización y Tecnología Rural” y responsable de la finca experimental de Rabanales de la Universidad de Córdoba, con la participación de representantes de las administraciones regionales de Aragón, Castilla-La Mancha y Castilla y León, que han analizado el futuro del cultivo de cereales en sus comunidades autónomas y cómo los agricultores que apuesten por sistemas más sostenibles pueden beneficiarse de políticas agroambientales.

El secretario general técnico del Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, José Luis Castellano Prats, ha destacado que: “las políticas agrarias son el incentivo para avanzar en sostenibilidad, y no la solución a la viabilidad económica de las explotaciones. El objetivo de las mismas es producir cereales reduciendo al mínimo el impacto medioambiental”.

El director general de Política Agraria Comunitaria de la Junta de Castilla y León, Juan Pedro Medina Rebollo, ha remarcado que “hay que hacer una PAC más integral favoreciendo a los agricultores más innovadores, no a los más necesitados, y fomentar que los productores y agricultores más competitivos sean ejemplo para los más pequeños”.

Por último, la directora general de Agricultura y Ganadería del Gobierno de Castilla-La Mancha, Cruz Ponce Isla, ha concluido la mesa afirmando que “es fundamental llevar a cabo proyectos como Innovatrigo que tienen una visión transversal de toda la cadena alimentaria. Todos estamos obligados a producir y consumir de manera sostenible”.

En resumen, todos los participantes han estado de acuerdo en la importancia de apostar por el desarrollo de cultivos más sostenibles en sus territorios, también para el caso del trigo, que podrían tener un mayor apoyo institucional, a través de políticas que fomenten nuevos sistemas de cultivo más respetuosos con el entorno