Info-Cit proporciona a los agricultores nuevas herramientas y más recursos para detectar de manera más eficiente las principales alteraciones y patologías en los cítricos.
La pérdida económica que ocasionan las fisiopatías y enfermedades fúngicas es una preocupación importante a nivel global dentro del ámbito frutícola. Identificar estas alteraciones resulta complicado, debido al gran número de desórdenes y enfermedades con causas diversas, que a menudo presentan síntomas similares. Clasificar y reconocer estas afectaciones demanda una amplia experiencia acumulada a lo largo de años o bien el asesoramiento externo.
Para paliar esta situación, es fundamental proveer al sector frutícola de herramientas útiles para mejorar la identificación de las principales enfermedades fúngicas y fisiopatías. Este es el propósito del proyecto demostrativo Info-Cit, el cual tiene como socios al Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) y al Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Cataluña. Este proyecto tiene como objetivo satisfacer las demandas de mayor información de los técnicos y profesionales que se dedican a la poscosecha de cítricos en Cataluña.
Con el propósito de alcanzar ese objetivo, el IRTA va a crear una base de datos fotográfica específica de las principales afecciones y patologías en los cítricos. Usando estas imágenes y la experiencia del programa de Poscosecha del IRTA, se generará nuevo material educativo (carteles, guías visuales y manuales técnicos) que se divulgará en el ámbito, junto con sesiones de formación y varias actividades de transferencia de conocimientos.
Gracias a este contenido informativo actualizado y ajustado a los cítricos del sector catalán, los expertos podrán detectar de manera más efectiva y rápida las principales afecciones fisiológicas y micóticas de sus frutos, pudiendo tomar acciones correctivas oportunamente y así disminuir las pérdidas.
Adicionalmente, estos datos pueden ayudar al personal técnico a organizar las partidas según su potencial de conservación, optimizando el destino comercial de los lotes. Esto no sólo puede ayudar a limitar las pérdidas y consolidar mercados cercanos, sino que también puede permitir la apertura de mercados más lejanos que todavía no están al alcance.
Con un mejor conocimiento de las alteraciones poscosecha de los cítricos y una detección más precoz, también es más fácil reducir la necesidad de productos fitosanitarios, logrando así unos frutos más saludables con una producción más respetuosa con el medio ambiente y una mayor rentabilidad económica, dando respuesta a los retos del Pacto Verde Europeo.