El Consejo General de Ingenieros Agrícolas y el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas y Peritos Agrícolas de Aragón celebran el próximo 19 de febrero en el marco de FIMA una jornada divulgativa que, bajo el título Innovación Agrícola: Tecnologías para una Agricultura de Precisión, analizará el uso y los beneficios de la teledetección y los drones en el ámbito agrícola.
La jornada –en la que participarán algunas de las empresas líderes en España en el uso de tecnologías innovadoras, como la teledetección o el uso de drones, aplicadas al ámbito agrario–, arrancará a las 10h con la ponencia de Pedro Oñorbe, director del grupo de trabajo de teledetección y drones de la ERSII de la Universidad Politécnica de Madrid, sobre legislación y normativa en el campo de los drones.
Le seguirá una ponencia de David Vinué, director técnico de Geopixel, sobre teledetección, que combina sistemas de observación, monitorización y toma de decisiones con el objetivo de mejorar la gestión del territorio.
A continuación, Sergio Pardo y Salvador Puig, de UAVworks, hablarán sobre las distintas aplicaciones que tienen los drones a la agricultura de precisión y todo lo que este campo puede avanzar en los próximos años.
La jornada concluirá con Alodia Martínez, técnico en GIS y Teledetección de la empresa Revolotear, que centrará su ponencia en el potencial que estas tecnologías tienen en Aragón.
“Hemos tratado de reunir a un abanico de profesionales y empresas que van a dibujar un panorama muy certero de cómo se están empleando este tipo de tecnologías en el ámbito agrario y los beneficios que pueden llegar a aportar. Estas tecnologías tienen aún mucho potencial de crecimiento y, sin duda, marcarán un antes y un después en la gestión del territorio”, afirma Javier Lorén, presidente del Consejo General de Ingenieros Agrícolas de España.
La teledetección y el uso de drones están demostrando ser unas herramientas idóneas para trabajar con precisión los cultivos, especialmente en la gestión de riegos o en la detección temprana y localizada de afecciones en las plantas. Esto permite optimizar la producción agraria, disminuir los costes, así como reducir el gasto del agua y de fertilizantes, con el consiguiente beneficio para el medio ambiente.
