El Gobierno de Cantabria ha puesto a disposición de los Laboratorios Edyma las líneas de ayudas que puedan encajar para el desarrollo de su proyecto de producción de semillas de patata por medio del sistema aeropónico (sin tierra) a partir de patatas in vitro.
El clima y las condiciones de Cantabria han sido el principal motivo para que esta empresa de Córdoba haya decidido ubicar su proyecto en la región, ya que mejora la sanidad y la producción de los tubérculos.
El consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria y el de Innovación, Industria, Turismo y Comercio, Francisco Martín, visitaron en días pasados las instalaciones de este laboratorio ubicadas en Viveros Barba, en Rada (Voto), que desarrolla un modelo innovador de producción de semillas de patata con el sistema de aeroponía, que integra una fase de laboratorio con otra de invernadero.
Según explicaron los miembros del Gobierno los gerentes de Edyma, Édgar Hazas y M. Ángeles García, durante la fase de laboratorio las plantas son saneadas y multiplicadas mediante técnicas de cultivo in vitro y luego se llevan al invernadero para que se desarrollen en un cultivo donde no se utiliza ningún sustrato, de tal manera que las raíces quedan suspendidas en el aire y mantenidas en unas condiciones controladas.
Los nutrientes suministrados aseguran un correcto desarrollo de las plantas para posteriormente recolectarse y comercializarse como semilla certificada de alta calidad.
Oria manifestó su satisfacción por la diversificación que se ha realizado en el ayuntamiento de Voto con la producción de vino y ahora con este proyecto innovador de siembra de patata que en su criterio puede convertir a Cantabria en una región pionera en este sistema de producción. Tanto Oria como Martín animaron a los empresarios de Edyma a continuar en esa línea de innovación.
Ventajas de Cantabria
Las ventajas más importantes de este sistema son la sanidad de las plantas que producen tubérculos libres de enfermedades que afectan al cultivo y el rendimiento de su productividad.
Además, el clima y las condiciones de Cantabria favorecen en alta medida estos parámetros, debido a la escasez de insectos que trasmiten enfermedades y a las temperaturas de la costa.
También, con respecto a Andalucía, la ubicación de Cantabria supone que los tubérculos se producen más cerca de los principales clientes que se ubican en Castilla y León.
Otra de las ventajas es el ahorro de agua durante el cultivo que puede alcanzar el 98%, gracias a la recirculación que se lleva a cabo en el sistema.
Según datos de la gerencia de Edyma, el proyecto comenzó su andadura en 2014 y en 2015 se alcanzó una producción de 180.000 tubérculos. En 2016 está previsto realizar dos producciones que alcanzarán los 360.000 tubérculos, ampliando la cartera de clientes hacia la exportación, ya que parte de la producción se destinará a Dinamarca, y por medio de los clientes daneses, a Argelia.
En la visita, además de los dos consejeros del Gobierno de Cantabria, han estado presentes la directora general de Pesca y Alimentación, Marta López y el director general de Desarrollo Rural, Félix Mendiguchía.