En el municipio de Fuenlabrada (Madrid), junto a la Universidad Rey Juan Carlos, se encuentran 10.000 metros cuadrados de invernadero dedicados a la producción hortícola. El semillero JM Escolar ofrece plantas en cepellón con variedades profesionales de alto rendimiento, así como gran variedad de plantas ornamentales.

Carmen Sánchez. Periodista.

El semillero JM Escolar nació hace tres generaciones como una empresa familiar. “La generación de mi abuelo hacía agricultura tradicional con todo tipo de hortícolas y fueron mi padre y mis tíos los que montaron el semillero hace unos veinte años”, cuenta Rafa Escolar, ingeniero agrónomo que ya pertenece a esta tercera generación de agricultores que continúa con el legado.

El semillero cuenta con un espacio de 10.000 metros cuadrados para sus plantas en cepellón.

“La generación de mi padre y mis tíos viajaba mucho, visitaban ferias, veían cómo se trabajaba en otros sitios… Les gustó el tema del semillero porque permite aprovechar el rendimiento al máximo y asegurarnos de que cada semilla que usamos dé lugar a una planta útil”, explica.

Primero hicieron un túnel de invernadero para ver cómo funcionaba la planta en cepellón, generando interés en otros agricultores de la zona, con lo que la empresa comenzó a vender a otros agricultores aparte de tener producción propia.

De esta manera, esta empresa que tiene entre diez y quince empleados -dependiendo si se encuentran en campaña, el punto de trabajo más alto del año, o no-, poco a poco fue incorporando Madrid la tecnología de los semilleros, en un momento en que nadie la tenía cuando comenzaron a trabajar con ella.

El núcleo grande de la empresa está dedicado a las hortícolas y desde que comenzasen con el proyecto del semillero, han ido ampliando el terreno hasta llegar a los 10.000 metros cuadrados con los que cuentan actualmente. “Coles, melón, sandía, pepino, tomate, pimiento, lechugas, cebollas… Básicamente todo lo que puedes echarle a la ensalada o buscar en un huerto, lo hacemos nosotros en el semillero”, apunta Escolar.
Además de las hortícolas, poco a poco también están introduciendo plantas ornamentales. “Empezamos hace unos cuatro años a hacer ornamentales y ahora tendremos unos 2.000 metros cuadrados de semillero dedicado a ellas, centrándonos principalmente en plantas de temporada, como pensamientos o prímulas”, explica.

Proceso de producción propio

Tras la llegada de la semilla, se siembra en las bandejas de cepellón que luego pasan a la cámara de germinación.

Todo el proceso de producción se lleva a cabo dentro del mismo semillero, donde tras la llegada de la semilla se siembra en las bandejas de cepellón para posteriormente pasar a la cámara de germinación. Una vez que la semilla germina, las bandejas pasan al invernadero, donde las riegan con un sistema por aspersión y controlan tanto el desarrollo de la planta como todos los aspectos relativos a ella.

“El control del ambiente aquí es mayor que en un campo abierto, con lo que podemos controlar las enfermedades, las plagas o la temperatura a la que se encuentran las plantas”, matiza Rafa.

También para prevenir enfermedades trabajan con plantas con raíces resistentes a enfermedades, injertadas en variedades comunes. En cuanto a tecnología del invernadero, Rafa cuenta que “siempre tratamos de ir poniendo cosas nuevas e ir mejorando las instalaciones”.

Variedad en semillas de alto rendimiento

Entre las semillas hortícolas cuentan con unas cuarenta variedades distintas, así como otras cuarenta de ornamentales, para ofrecer al cliente la que mejor se adapte a sus necesidades, así como un alto rendimiento. Especialmente, en hortícolas cuentan variedades que van desde las más tradicionales a las híbridas, pasando por las ecológicas.

En JM Escolar puede encontrarse todo tipo de hortícolas.

Asimismo, en busca de ese máximo rendimiento para sus clientes, Semillero JM Escolar también cuenta con servicios de orientación en la elección de las mejores variedades de plantas y semillas según el terreno y el clima, así como asesoramiento personalizado para el control de plagas y enfermedades o calendarios de siembra y documentación sobre los cultivos.

Como servicios complementarios a sus clientes también ofrece ayuda para elegir maquinaria que mejor se adecúe a la hora de trabajar en el huerto, diseños de riego e indicaciones para instalarlo o incluso un servicio de reparación, revisiones y mantenimiento de las maquinarias.

Además, en JM Escolar han diversificado la actividad agrícola con la jardinería, junto a la cual entre sus servicios se encuentra también el diseño de estanques, cascadas o fuentes.

Nuevas vías de comercialización

Este semillero cuenta con varias vías de comercialización. De esta manera, parte de la producción se comercializa a través de la tienda situada a las afueras de Fuenlabrada, en la que tienen unos 1.000 metros cuadrados de exposición, y parte en la venta a terceros procedentes de viveros de la zona. “Acuden a nosotros como mayoristas y luego ellos lo comercializan. Luego también hay una parte de producción que va para gente que vende en los mercadillos o incluso clientes particulares”, señalan.

Entre los productos de su tienda, además de semillas, plantas en cepellón, herramientas y maquinaria,

Dentro del invernadero el clima se controla más fácilmente.

también se encuentran productos fitosanitarios, sustratos y abonos, tanto tradicionales como ecológicos.

Recientemente han comenzado a abrir fronteras en cuanto a las vías de comercialización y se han adentrado en el terreno de la venta online. “El otro día tuvimos el primer pedido online, de una chica de Barcelona”, cuentan.

La idea es dar cobertura a nivel nacional y, desde su punto de vista, las herramientas que Internet brinda son la manera más factible de crecer ahora mismo. Por ello, aprovechan el papel que las tecnologías como las  redes sociales, donde poco a poco están empezando a ser más activos para que su trabajo llegue a más gente.