Con el objetivo de conseguir una agricultura más competitiva y sostenible que logre más con menos, la Comisión Europea ha puesto en marcha el proyecto EIP-AGRI (European Innovation Partnership on Agricultural Productivity and Sustainability) para acercar la investigación a su aplicación práctica en el campo y crear grupos que trabajen de forma conjunta en diferentes proyectos a través de la red Eip-Agri y su web: www.eip-agri.eu.

En su primera intervención ante el Parlamento Europeo a mediados del pasado mes de noviembre, el nuevo comisario de Agricultura, Phil Hogan, aseguró que la innovación será un elemento prioritario en su mandato, subrayando que tanto la agricultura como el desarrollo rural son elementos clave para dar respuesta a las prioridades en empleo, crecimiento, inversión y competitividad de la Comisión Juncker.

La agricultura ha sido siempre un sector innovador. Los agricultores europeos se han adaptado para dar respuesta a la demanda de alimentos seguros y de calidad de la sociedad actual, y han logrado este objetivo sin perder de vista la protección del medio ambiente y haciendo una gestión más eficiente de los recursos naturales.

Phil Hogan, comisario de Agricultura de la UE.

“No obstante, tanto los desafíos como las oportunidades que se nos presentan ahora son tan grandes como los de hace sesenta años, especialmente la seguridad alimentaria: en 2050 se calcula que el planeta estará habitado por 9.600 millones de personas y los sistemas alimentarios mundiales tendrán que aumentar tanto su eficiencia como su productividad para asegurarse de que la población tendrá acceso a los alimentos que necesite”, apuntaba Hogan.

“Tendremos que hacer más con menos, reciclando más, pero sobre todo desperdiciando menos y la agricultura europea tiene que estar en la primera línea de esta política de eficiencia. La innovación en agricultura tiene que garantizar la protección de los recursos naturales, la biodiversidad, el paisaje, la conservación del suelo y un uso eficiente del agua, e incrementar los beneficios medioambientales y climáticos que generan las explotaciones agrarias, pero también es clave para un desarrollo rural sostenible. A través de la innovación podremos mantener la competitividad del sector agroalimentario y crear más y mejores empleos en las áreas rurales, al tiempo que salvaguardamos el planeta para las generaciones venideras”, añadía el comisario.

La innovación está en todas partes. En Europa, científicos, industria, y agricultores, de forma colectiva o individual trabajan actualmente en nuevas formas de producir, almacenar y comercializar productos alimentarios y esto está sucediendo a lo largo de toda la cadena de valor. Por ejemplo: sistemas de agricultura inteligente (smart farming systems) que emplean cámaras y sensores y otras formas de tecnología para mejorar la eficiencia de la irrigación o reducir el uso de pesticidas a través de la mejora de la detección de plagas y enfermedades, que en estos momentos ya se están probando en campo.

La gente se pregunta si en el futuro habrá coches que circulen por las calles sin un conductor y en el campo ya tenemos maquinaria agrícola que funciona de forma totalmente autónoma.

¿Qué es EIP-AGRI?

“Sin embargo los lazos entre la investigación, los agricultores y la industria son aún muy débiles”, recordaba Hogan, y precisamente para dar una respuesta a esta situación la CE ha puesto en marcha EIP-AGRI (European Innovation Partnership on Agricultural Productivity and Sustainability).

Prácticamente se trata de llevar el laboratorio al campo, para que investigadores, agricultores, técnicos, industria, organizaciones no gubernamentales así como otros profesionales que forman parte de la cadena de valor de los productos agrarios puedan trabajar de forma conjunta para tener mejores resultados que puedan ser implementados en campo lo más pronto posible.

El proyecto EIP-AGRI se basa en: la necesidad de establecer una agenda de investigación, la filosofía de compartir el conocimiento disponible y sobre todo el concepto de co-propiedad (incluyendo capital público y privado), lo que permite agilizar la puesta en marcha de las diferentes soluciones.

Cómo funciona

EIP-AGRI funciona a partir de grupos de discusión y grupos operativos. Cada grupo de discusión está integrado por veinte personas de diferentes especialidades y áreas, que deberán abordar un temas concretos dentro de los programas de desarrollo rural. Su trabajo sirve de inspiración para establecer los grupos operativos y conseguir soluciones prácticas en campo.

Desde que el proyecto arrancó en 2013 se han formado trece grupos de discusión que abarcan desde producción animal, áreas de interés medioambiental, fertilización eficiente, pasando por recursos genéticos, pastos permanentes, producción ecológica, agricultura de precisión y cultivos proteicos, hasta cadenas cortas de distribución de los productos alimentarios.

Estos grupos elaboran un informe final, que se puede consultar en www.eip-agri.eu, con una serie de recomendaciones prácticas y una propuesta de acciones y temas para los grupos operativos.

Según el propio equipo de desarrollo de EIP-AGRI, uno de los desafíos con los que se están encontrado es la incorporación de agricultores a los grupos de discusión, ya sean propietarios o técnicos de grandes explotaciones como de pequeñas y medias empresas. Sin embargo desde la CE destacan la importancia de participar en estos grupos ya que ello permite “desde proponer temas hasta asegurarse de que la aplicación práctica sea una de las prioridades del proyecto”.

Por su parte, los grupos operativos debe estar integrados por personas de diferentes perfiles (agricultores, investigadores, etc), dispuestas a trabajar de forma conjunta en la consecución de soluciones prácticas a problemas concretos o en oportunidades de innovación, y que además, deben estar dispuestas a compartir los resultados a través de esta red europea de investigación, de forma que otros grupos de la red EIP-AGRI puedan beneficiarse de su trabajo.

Todas las personas que formen parte de uno de estos grupos operativos tienen que tener un papel activo asumiendo una serie de tareas y responsabilidades. El establecimiento de estas tareas y responsabilidades de forma clara contribuirá al buen funcionamiento del grupo.

En definitiva los grupos operativos se ocupan de:

• Comenzar por analizar un problema específico o una oportunidad y asegurarse de que se trata de una cuestión a la que es necesario dar una respuesta o que la innovación en la que se va a trabajar está claramente identificada.
• Desarrollar la idea (identificar las necesidad que encontrarán en el camino).
• Encontrar socios y formar un grupo para ello. Puede que sea necesario incorporar otros partners que puedan aportar información específica, experiencia o conocimiento.
• Preparar una hoja de ruta: un plan con objetivos claros, presupuesto y división de las responsabilidades entre los miembros del grupo.
• Identificar los requisitos de financiación para poder optar a ella.
• Preparar la propuesta de proyecto y la solicitud de financiación.
• Una vez que el proyecto esté en marcha o haya concluido, el grupo operativo deberá compartir sus resultados en la red EIP-AGRI.

Funcionamiento de los grupos operativos

La política comunitaria de Desarrollo Rural puede contribuir al establecimiento y financiación de los grupos operativos durante el periodo 2014-2020, a través de los Programas de Desarrollo Rural (PDRs) que desarrolla cada Estado miembro o región.

Estos programas puede ofrecer ayuda financiera a los grupos operativos que quieran desarrollar, probar o aplicar innovaciones, bien en lo relativo al diseño del proyecto y para los servicios de ayuda a la investigación que puede contribuir a encontrar partners, bien para los costes de funcionamiento del grupo, costes directos de proyectos específicos o actividades de promoción y cooperación con actores de otras regiones.

Aparte de esto, el grupo operativo podrá recibir ayuda financiera vinculada más específicamente a sus actividades: transferencia del conocimiento, acciones informativas o servicios de asesoramiento.

Un website interactivo

Para conectar a todas estas personas y dar visibilidad a todos estos resultados, el website de Eip-Agri, www.eip-agri.eu, operativo desde el pasado mes de mayo, ha sido diseñado con dos objetivos fundamentales: ser interactivo y fácil de usar. En él, el usuario puede:

• Buscar: proyectos en los que colaborar, proyectos existentes que den soluciones a cuestiones formuladas ahora, ideas, partners, financiación.
• Compartir: necesidades de investigación, ideas para proyectos, planes de financiación, convocatorias de ayudas.

Pero además, Eip-Agri ofrece visibilidad, la posibilidad de entrar en contacto con otras personas con los mismo problemas, investigadores o incluso personas con poder de decisión político tanto a nivel europeo, como nacional o local, para el desarrollo de estos proyectos de investigación.

La investigación agraria en la iniciativa Horizonte 2020

De forma paralela a la política de desarrollo rural, la UE ha decidido dar un impulso considerable a la investigación en agricultura a través de la iniciativa Horizonte 2020. Se ha doblado el presupuesto en comparación con el periodo de programación anterior, con el objetivo de profundizar en temas transversales y evitar la investigación tradicional compartimentada por áreas.

En lo que a la agricultura se refiere, Hogan tiene tres prioridades:

• Aumentar la eficiencia, sostenibilidad, resiliencia de la producción primaria, al tiempo que se incrementa su capacidad para mitigar el cambio climático.
• Suministrar servicios al ecosistema y bienes públicos.
• Dotar de más poder a las áreas rurales para reforzar el apoyo a la innovación.

Al amparo de Horizonte 2020, nuevos formatos de proyecto han sido creados para poner en marcha el concepto EIP. Por ejemplo, los proyectos “multi-actor” son proyectos de investigación en los que agricultores y usuarios finales estarán involucrados a lo largo de toda su duración. No será solo objeto de estudio sino que estarán involucrados en el proceso de aportar soluciones.

Horizonte 2020 contribuirá a profundizar en la base del conocimiento en campos como la fertilidad del suelo, la sanidad animal y vegetal o el papel funcional de la biodiversidad. El hecho de que la investigación agraria y la innovación bajo la iniciativa Horizonte 2020 estén estrechamente coordinados con la PAC (a través de las ayudas a la innovación que incluye el Desarrollo Rural) es una oportunidad de oro para poner en marcha acciones de innovación a nivel local, ampliando la base del conocimiento sobre la agricultura europea.