El mercado de empacadoras tiene en la última década una tendencia descendente en cuanto al número anual de unidades vendidas, sin embargo entre los años 2015 y 2018 las ventas tuvieron un ligero repunte. En este artículo se detallan las novedades presentadas en los distintos órganos que componen una empacadora por las principales marcas que copan el mercado de estas máquinas.

Pablo Pastrana Santamarta, F. Javier López Diez, Victoriano Marcelo Gabella y Ángel Sahagún López. Departamento de Ingeniería y Ciencias Agrarias. Universidad de León.

Durante 2018 la ins­crip­ción de em­pacadoras fue de 820 unidades mientras que en 2015 fue de 506. En cuanto a la tipología de los equipos la estadística re­coge tres grupos: empacadoras con­ven­cionales, grandes pacas y rotoem­pa­cadoras (cuadro I).

Las ventas por comunidades autónomas tienen una distribución diferente en función del tipo de empacadora. Mientras que en las comunidades de la cornisa cantábrica se agrupa el 48% de las inscripciones de rotoempacadoras con 225 equipos, destacando Galicia con 98 equipos (21%) en el caso de las empacadoras de grandes pacas es Castilla y León la que lidera las ventas con 93 unidades (34%). Las CC.AA con una mayor venta de equipos fueron Castilla y León con 178 equipos, Galicia con 103 y Cataluña con 84. Por provincias, Lugo acaparó el mayor nú­mero de inscripciones con 50, seguida de Cantabria con 45, Asturias con 43, Badajoz con 41, Lleida con 38 y Palencia con 34.

En cuanto a las marcas comerciales con mayor número de inscripciones en 2018 es Krone con 184 unidades la marca que lidera las ventas, seguida de New Holland con 141, Claas con 90, y John Deere con 77, hasta un total de 32 marcas comerciales con inscripciones durante el año 2018 (cuadro II).

 

Sistemas de recogida y picado

El sistema de recogida agrupa a todos los mecanismos que llevan el forraje hasta la cámara de compresión.

Claas dispone de un accionamiento del pick-up hidráulico, la velocidad de la alimentación puede ser regulada y puede revertirse fácilmente desde la cabina del tractor en caso de bloqueo. La ventaja en cultivos delicados como la alfalfa es que la velocidad de alimentación se puede reducir para minimizar la pérdida de la hoja.

En el caso del picador las marcas han aumentado el número de cuchillas, facilitado su mantenimiento y perfeccionado los sistemas de seguridad.

La rotoempacadora Pottinger permite la extracción lateral del sistema picador de cuchillas sobre una guía. De este modo resulta más fácil llevar a cabo las tareas de mantenimiento y revisión en una posición más ergonómica para el operador (foto 1).

El sistema de corte Xcut de Krone (foto 2) dispone de un sistema de protección individual de muelles para las cuchillas que garantiza un trabajo sin daños en caso de recoger algún objeto extraño. Una vez desaparecido el objeto, las cu­chillas recuperan automáticamente su po­sición de trabajo. En esta misma zona dis­pone de otro sistema de seguridad en este caso para el accionamiento del me­ca­nismo de corte y picado, consistente en un embrague de levas que lo protege de sobreesfuerzos.

John Deere dispone de un fondo abatible (foto 3) bajo los alimentadores de sus rotoempacadoras. Este dispositivo es ac­cionado oleohidráulicamente, y cuenta con un dispositivo en parelogramo deformable que facilita la eliminación de las obstrucciones.

Foto 3. Fondo abatible mediante parelogramo deformable de John Deere para sus rotoempacadoras Fuente: John Deere.

En cambio, McHale permite a su fondo abatirse, en sentido horario, para que puedan eliminarse las obstrucciones.

El sistema AFC de las rotoempacadoras Kverneland (foto 4) busca conseguir una rotopaca en la que la presión sea similar en su parte izquierda y derecha. Se pretende evitar que el operador tenga que es­tar pendiente de mover el conjunto trac­­tor empacadora a izquierda y derecha de la línea de forraje. El sistema cuenta con sensores en la cámara de recogida, cuya información es procesada, haciendo que dos cilindros hidráulicos muevan trans­versalmente la lanza de la empacadora, haciendo que el operador solo ten­ga que preocuparse de conducir sobre el cordón.

 

Sistemas de presión de las rotoempacadoras

En el caso de las rotoempacadoras varias empresas han tratado de permitir el trabajo en continuo sin que sea necesario detenerse durante el atado o encintado de la paca.

Krone en su serie Ultima equipa a su ro­toempacadora encintadora de cámara va­riable con una cámara de precompresión (figura 1) que va variando de tamaño y en la que se acumula el forraje mientras se lleva a cabo el atado de la paca y la transferencia de la paca a la encintadora. Esa cámara de precompresión está formada por dos cintas que pueden variar en su inclinación y velocidad de rotación.

Figura 1. Funcionamiento del sistema de la precámara de Krone Ultima. Fuente: Krone.

Vicon en su modelo de rotoempacadora-encintadora de cámara fija FastBale dispone de dos cámaras de empacado: una cámara principal donde se lleva a cabo el atado con malla y la mayor parte de la formación de la paca y una precámara a la que el forraje se dirige mientras se lleva a cabo el atado en la cámara principal y que termina su trabajo cuando la paca tiene aproximadamente dos tercios del diámetro final que es de 1,25 m. Estas dos cámaras comparten rodillos.

El sistema MPSII de Claas para sus em­pa­cadoras de cámara fija permite incrementar las presiones de la paca haciendo que tres de los rodillos pivoten hacia el centro e incrementado la presión en la for­mación de la paca desde el primer momento.

 

Sistemas de presión en de las pacas primásticas

Kuhn ha diseñado Twinpact (figura 2). Un sistema de pistón, dividido el pistón en dos partes –una superior y otra inferior– que comprimen la paca en dos pasos diferenciados. Los dos semipistones golpean la paca con un retardo entre ellos, esto permite incrementar la presión de la paca, ya que la fuerza del pistón se aplica sobre una menor superficie consiguiendo de este modo aplicar una mayor presión.

Figura 2. Sistema Twinpact de doble pistón de Kuhn para las empacadoras. Fuente: Kuhn.

 

Sistemas de atado

La posibilidad de dividir las grandes pa­cas en otras más pequeñas y los sistemas de limpieza de los atadores son las mayores novedades en este apartado.

Krone permite realizar con su serie Big Pack, multipacas. El sistema mantiene el formato de grandes pacas rectangulares atadas por cuatro cuerdas, pero estas pacas están formadas por pacas más pequeñas (hasta un máximo de nueve) atadas por dos cuerdas. Esta opción permite seguir teniendo en campo las ventajas de las grandes pacas y en la granja o en el es­tablo el poder manejar las pequeñas pacas.

La limpieza en el sistema de atado constituye uno de los puntos donde las marcas buscan soluciones más eficientes, tratando de mantener esta zona lo más limpia posible para evitar atascos.

Fendt (figura 3) dispone de un ventilador de flujo transversal que es accionado por el sistema hidráulico. Está en continuo funcionamiento durante el trabajo impidiendo que residuos y suciedad se acumulen sobre el sistema de atado. New Holland (figura 4) sin embargo, monta tres ventiladores axiales sobre los atadores y ofrece la opción de montar un sistema de aire comprimido para trabajos en ambientes muy polvorientos. Krone opta por la limpieza por aire comprimido en sus mecanismos de atado, mientras que Deutz-Fahr cuenta en su gama con accionamiento eléctrico o hidráulico.

 

Ayudas electrónicas

Las empacadoras, como el resto de má­qui­nas agrícolas, siguen incorporando ayudas electrónicas al trabajo, permitiendo de este modo aumentar la eficacia y reducir la fatiga del operador automatizando procesos y operaciones.

El sistema SmartFill de New Holland dispone de dos sensores situados a ambos lados de la precámara registrando el flujo de alimentación del producto. Si se detecta que el producto entra solo por un lado, el monitor IntelliView informa al operador para que conduzca más hacia la derecha o la izquierda de la hilera y mantenga la alimentación uniforme.

El sistema Intellicruise de New Holland (fi­gura 5) controla la velocidad de avance del tractor mediante la tecnología Isobus Clase III con dos modos de funcionamiento:

• Modo control de carga. La velocidad del tractor se adapta para conseguir una capacidad óptima. Las paletas sen­­­soras de la precámara miden la cantidad de producto que llega y el tiem­po que tarda en llenarse para man­tener la velocidad idónea del tractor.
• Modo control de placas. La velocidad del tractor se ajusta en función del gro­sor de las placas de las pacas y el sistema intenta obtener la cantidad exacta de placas que haya definido el operador.
  Case IH también monta ambos sistemas.

Con el sistema APC de Claas (figura 6) el operador selecciona la densidad de paca deseada e identifica la calidad del hilo, utilizando el terminal Isobus y con los datos de tres sensores en los anudadores y uno en el bastidor principal, la em­pacadora actúa sobre el sistema de prensado regulando automáticamente la presión de prensado. El sistema KCS mon­ta tres sensores adicionales en los atadores controlando en todo momento la calidad del atado.

 

Accesorios

Krone dispone de una plataforma para agrupar pacas rectangulares grandes (fo­to 5). El carro se conecta a la parte trasera de la empacadora y de modo automático coloca las pacas a izquierda y derecha, permitiendo la agrupación de hasta cuatro pacas.

 

Mantenimiento

Las labores de mantenimiento diario de las empacadoras ocupan en campaña parte del tiempo de trabajo del operador. Estos tiempos de mantenimiento son im­prescidibles para el buen funcionamiento de los equipos. Engrasado, limpieza y reposición de cuerdas son algunas de estas tareas. Los fabricantes tratan de facilitar y reducir el tiempo que el operador emplea diariamente en estas tareas. Algunas de las soluciones son:

• Rollos de cuerda en compartimentos que estén aislados de la suciedad. Se incrementa el espacio para almacenar rollos y de este modo se gana en in­dependencia.
• Sistema de engrase automático quesuministra grasa a los engrasadores de ejes y rodamientos y de aceite mediante cepillos a las cadenas.
• Cuchillas de acero antidesgaste Har­dox que aumentan su vida útil y reducen de ese modo el mantenimiento.